
¿Alguna vez te alejaste de Dios y llegaste a pensar que ya no eras importante para Él? Jesús contó la siguiente historia: “Si un hombre tiene cien ovejas y una de ellas se pierde, ¿Qué hará? ¿No dejará las otras noventa y nueve en el desierto y saldrá a buscar la perdida hasta que la…

¿Cuál es el grado de influencia que tienes en este mundo? ¿Eres consiente que tu presencia como seguidor de Jesús puede inclinar la balanza para bien en toda situación? Jesús afirmó al respecto: “La sal es buena para condimentar, pero si pierde su sabor, ¿Cómo la harán salada de nuevo? La sal sin sabor no…

Un padre de familia rogó a Jesús: “Maestro, traje a mi hijo para que lo sanaras. Ten misericordia de nosotros y ayúdanos si puedes”. ¿Cómo que “si puedo”?, preguntó Jesús. “Todo es posible si uno cree”. Al instante el padre clamó: “Sí, creo, pero ayúdame a superar mi incredulidad”. ¡Qué expresión más sincera y reveladora!…

Jesús se estaba preparando para ir a Jerusalén, pero en la ruta tenía que cruzar por Samaria, un pueblo que no era hospitalario con los judíos. A pesar de eso, envió mensajeros a esa región para que le preparasen un lugar de tránsito dónde descansar. Mas, los habitantes de Samaria no les recibieron y se…

La muerte de Jesús en la cruz posibilitó el perdón de pecados para todo aquel que cree en Él, y asimismo, tuvo consecuencias determinantes en nuestra nueva comunión con Dios. “Mas Jesús, habiendo otra vez clamado a gran voz, entregó el espíritu. Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba…

Jesús fue a la casa de Pedro, donde encontró a la suegra muy enferma, con mucha fiebre. “Por favor, sánala”, le suplicaron todos. De pie junto a su cama, Jesús reprendió a la fiebre y la fiebre se fue de la mujer. Ella se levantó de inmediato y les preparó una comida. El Señor había…

Jesús, hablando sobre la vida más allá de la muerte, afirmaba: “Mucho después de que Abraham, Isaac y Jacob murieron, Dios le dijo a Moisés: Yo soy el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob. Por lo tanto, Él es Dios de los que están vivos, no de los muertos”.…

En cierta oportunidad, Jesús habló de dos hombres que subieron al templo a orar. Uno era muy religioso, y el otro era un cobrador de impuestos. El religioso, puesto en pie, oraba consigo mismo: “Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este cobrador de impuestos”.…

Jesús, hablando con sus discípulos, les decía: “Ustedes han oído que se dijo a sus antepasados: No faltes a tu juramento, sino cumple con tus promesas al Señor. Pero yo les digo: No juren de ningún modo, ni por el cielo, porque es el trono de Dios; ni por la tierra, porque es el estrado…

Uno de sus discípulos le dijo a Jesús: “Señor, enséñanos a orar”. Y él les dijo: “Cuando oren, digan, Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre, venga tu reino”. Cuando le llamamos “Padre nuestro”, estamos reconociendo su cercanía, familiaridad, ternura y protección sobre nosotros. Al afirmar “Que estás en los cielos”,…